jueves, 14 de enero de 2010

PRELUDIO,




PRELUDIO.

Camino en mis noches sin luna y sin luz,
perdido en la ansias de mi soledad
y vivo tratando de resucitar
tan solo un poquito de felicidad.

Que Dios me acompañe y a mi corazón
que ha entregado tanto y que tanto perdió,
que Dios me acompañe por el vendaval
de esta vida mía que viene y se va.

Tan solo en el tango yo encuentro ilusión,
consuelo y alivio para mi dolor,
cuando en la penumbra con su bandoneón
le dice a mi oído palabras de amor.
______________________

Fabio A. Pabon M.
CURANDERO TANGO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario